El obispado complutense





Escudo de la diócesis complutense, combinando el ajedrezado del
cardenal Cisneros con los atributos del martirio de los Santos Niños



Existe constancia documental de la existencia de un obispado complutense en las postrimerías del imperio romano y durante el reino visigodo, quizás perpetuado también en el período de dominación musulmana. Sin embargo es muy poco lo que se conoce de él, salvo su estrecha vinculación con el culto a los Santos Niños, que motivó el traslado de la ciudad romana desde su asentamiento en el Juncal hasta el Campo Laudable, embrión del casco antiguo medieval alcalaíno, y una lista de varios obispos que asistieron a los Concilios de Toledo. Todo lo demás proviene de fuentes poco fiables según la historiografía moderna, que afirman que el fundador del obispado fue el arzobispo toledano Asturio Serrano a principios del siglo V.

Junto con san Asturio los obispos complutenses aceptados por los historiadores son Novelo (c. 579-c. 589), Presidio (610), Hilario (633-646), Dadila (653-655), Acisclo (675), Fuldemiro (681), Agricio (683-684), Espasando (688-693) y, ya en época mozárabe, Venerio (c. 850). Existen listas en las que a estos diez prelados se suman bastantes más, los cuales no están suficientemente documentados.

Tampoco se sabe demasiado del final del obispado, aunque todo parece indicar que sobrevivió a la invasión musulmana hasta finales del siglo IX, sin que exista constancia documental de que, tal como afirman algunos historiadores clásicos, perviviera hasta la reconquista de la ciudad o que con anterioridad a ésta su sede fuera trasladada a Guadalajara. Probablemente ya no existía cuando en 1099, antes incluso de la reconquista definitiva del castillo en 1118 -durante varias décadas Alcalá estuvo en plena frontera de Castilla con el reino almorávide- una bula del papa Urbano II agregaba la antigua diócesis complutense a la archidiócesis de Toledo, anexión que fue confirmada por Calixto II en 1122 y por Honorio II en 1127.

Ésta no era la costumbre habitual de restaurar las viejas diócesis visigodas conforme volvían a dominio cristiano, y se debió a que la conquista de Alcalá fue dirigida por el arzobispo toledano Bernardo de Sedirac. A la dependencia eclesiástica de Toledo se sumó en 1129 la cesión del señorío al arzobispado por el rey Alfonso VII, lo que creó una estrecha dependencia entre Alcalá y los prelados toledanos. Y si bien por un lado la villa y posteriormente ciudad perdió la posibilidad de contar con diócesis propia, por otro contó durante siglos con la protección de quienes eran los personajes más poderosos de Castilla después de los propios reyes, lo que le supuso infinidad de beneficios incluida la fundación de la Universidad por el Cardenal Cisneros.

Alcalá perteneció vinculada política y eclesiásticamente al arzobispado de Toledo hasta bien entrado el siglo XIX. Los señoríos seculares fueron suprimidos por las Cortes de Cádiz en 1812 y, tras las convulsiones políticas del reinado de Fernando VII, de forma definitiva en 1837. La división provincial de 1833 -hubo otras anteriores, todas ellas efímeras- la incorporó a la provincia de Madrid, mientras la segregación eclesiástica no tuvo lugar hasta que en 1885 el papa León XIII creó la nueva diócesis de Madrid-Alcalá, elevada al rango de archidiócesis en 1964.

El 23 de julio de 1991 el papa Juan Pablo II escindió de la archidiócesis madrileña las diócesis de Alcalá y Getafe como sufragáneas de ésta, por lo que el antiguo obispado complutense se vio continuado por el nuevo tras más de un milenio pasado dede su desaparición.


Izquierda, mapa de la provincia eclesiástica de Madrid. Tomado de obispadoalcala.org
Derecha, mapa de la diócesis con los arciprestazgos. Tomado de la Complupedia


La diócesis de Alcalá ocupa una extensión de 2.586 km2 repartidos entre 55 municipios que suman un total de algo más de 800.000 habitantes. Su territorio es una franja alargada que recorre de norte a sur la parte oriental de la provincia, siendo algo mayor que la comarca histórica y el antiguo partido judicial. Cuenta con 93 parroquias divididas en diez arciprestazgos, de los cuales dos -Alcalá Norte y Alcalá Sur- corresponden a Alcalá, con un total de 16 parroquias: Santo Ángel, San Bartolomé, San Diego, San Francisco, San Isidro Labrador, San José, San Juan de Ávila, Nuestra Señora de Loreto (parroquia castrense), San Marcos, Santa María la Mayor, San Pedro Apóstol (Catedral-Magistral), Santiago Apóstol, Santa Teresa de Jesús, Nuestra Señora del Val, Santo Tomás de Villanueva y Virgen de Belén.

Los ocho restantes son los siguientes, con los correspondientes municipios* y parroquias.

Arciprestazgo de Algete: Algete y Santo Domingo (2), Fuente el Saz, Patones, Talamanca, Torrelaguna, Torremocha, Valdeolmos y Alalpardo (2), Valdepiélagos y Valdetorres. Total, 11 parroquias.

Arciprestazgo de Arganda del Rey: Arganda del Rey y La Poveda (3), Campo Real, Morata de Tajuña, Perales de Tajuña y Valdilecha. Total, 7 parroquias.

Arciprestazgo de Coslada-San Fernando: Coslada (6) y San Fernando de Henares (3). Total, 9 parroquias.

Arciprestazgo de Daganzo: Ajalvir, Camarma de Esteruelas, Cobeña, Daganzo de Arriba, Fresno de Torote** y Serracines (2), Meco, Paracuellos de Jarama y Los Berrocales (2), Ribatejada y Valdeavero. Total, 11 parroquias.

Arciprestazgo de Rivas-Vaciamadrid: Mejorada del Campo (2), Rivas-Vaciamadrid (3) y Velilla de San Antonio. Total, 6 parroquias.

Arciprestazgo de Torrejón de Ardoz: Torrejón de Ardoz. Total, 8 parroquias.

Arciprestazgo de Torres de la Alameda: Anchuelo, Corpa, Loeches, Nuevo Baztán, Olmeda de las Fuentes, Pezuela de las Torres, Pozuelo del Rey, Santorcaz, Los Santos de la Humosa, Torres de la Alameda, Valverde de Alcalá, Villalbilla Los Hueros y Zulema (3) y Villar del Olmo. Total, 15 parroquias.

Arciprestazgo de Villarejo de Salvanés: Ambite, Brea de Tajo, Carabaña, Estremera, Fuentidueña de Tajo, Orusco de Tajuña, Tielmes, Valdaracete, Villamanrique de Tajo, Villarejo de Salvanés. Total, 10 parroquias.


*Cuando en un municipio existen varios núcleos de población -pedanías o urbanizaciones- que cuentan con parroquia propia los reflejo agrupados, dando el número total de parroquias del municipio pero indicando los nombres de estos núcleos de población

**Pese a ser oficialmente la cabecera del municipio, Fresno de Torote se encuentra prácticamente deshabitado, estando concentrada la población en la antigua pedanía de Serracines. Contabilizo en el listado la parroquia de Fresno, consagrada a la Asunción, aunque según todos los indicios actualmente carece de culto, razón por la que no aparece en el listado oficial del obispado reduciéndose la cifra real a 92 parroquias en lugar de 93.


Episcopologio complutense


Manuel Ureña Pastor 1991 - 1998
Jesús Esteban Catalá Ibáñez 1999 - 2008
Juan Antonio Reig Pla 2009 - 2022
Jesús Vidal Chamorro (administrador apostólico) 2022 - 2023
Antonio Prieto Lucena 2023 -

Manuel Ureña Pastor



El primer obispo complutense fue Manuel Ureña (Albaida, Valencia, 1945). Designado el 23 de julio de 1991 tomó posesión el 13 de octubre de ese año, ejerciendo el cargo hasta el 1 de julio de 1998, fecha en que fue nombrado obispo de Cartagena. Con anterioridad a su llegada a Alcalá había sido obispo de Ibiza (1988-1991), y se mantuvo al frente de la diócesis cartaginense hasta 2005, fecha en la que pasó a ser arzobispo de Zaragoza. En noviembre de 2014 renunció al cargo por motivos de salud, pasando a ser arzobispo emérito de esta archidiócesis.


Jesús Catalá Ibáñez



Tras un período de interinidad en el que monseñor Ureña ejerció como administrador apostólico, el nuevo prelado, Jesús Catalá (Villamarchante, Valencia, 1949), fue nombrado obispo de la diócesis el 27 de abril de 1999, tomando posesión el 30 de julio. Procedía de la diócesis de Valencia, de la que era obispo auxiliar desde 1996, y el 10 de octubre de 2008 fue nombrado obispo de Málaga, sede de la que tomó posesión el 13 de diciembre, ejerciendo de administrador apostólico hasta la llegada de Juan Antonio Reig Pla.


Juan Antonio Reig Pla



Le sucedió Juan Antonio Reig Pla (Cocentaina, Alicante, 1947). Fue nombrado el 7 de marzo de 2009, siendo su toma de posesión el 25 de abril de este mismo año. Previamente había sido obispo de Segorbe-Castellón (1996-2005) y de Cartagena (2005-2009). El 7 de julio de 2022, al cumplir la edad reglamentaria de 75 años, presentó su renuncia al papa Francisco, el cual la aceptó el 21 de septiembre, tan sólo dos meses y medio después, pasando a ser el primer obispo emérito complutense.


Jesús Vidal Chamorro (administrador apostólico)



El 21 de septiembre de 2022 fue nombrado administrador apostólico de la diócesis Jesús Vidal Chamorro (Madrid, 1974), obispo auxiliar de Madrid, que permaneció en el cargo hasta la toma de posesión del nuevo obispo, Antonio Prieto Lucena, en junio de 2023..


Antonio Prieto Lucena



La interinidad de la sede vacante se resolvió con la elección como nuevo obispo complutense, el 1 de abril de 2023, de Antonio Prieto Lucena (La Rambla, Córdoba, 1974), hasta entonces canónigo de la Catedral de Córdoba y vicario general de la diócesis. Monseñor Prieto Lucena es el primer prelado que accede a la diócesis complutense sin haber sido previamente titular de otra, razón por la que el día 10 de junio de 2023 se celebró su consagración episcopal en la Catedral-Magistral de manos del cardenal Carlos Osoro, acompañado por el nuncio apostólico Bernardito Auza y el obispo de Córdoba Demetrio Fernández.




Cartel oficial de la consagración de monseñor Prieto


Este acontecimiento no tenía lugar en nuestra ciudad desde hacía casi 1.200 años, puesto que la última consagración episcopal de la que se tiene constancia histórica fue la del obispo mozárabe Venerio, datada hacia el año 850.



Ver también:
Primer centenario de la diócesis de Madrid-Alcalá


Publicado el 13-6-2023