Los Santos Niños en la pintura
El cuadro de José del Castillo





Los Santos Niños ante Daciano. Cuadro de José del Castillo



Cuando en 1998 publiqué por vez primera los artículos dedicados al culto a los Santos Niños en Madrid, explicaba que en la antigua parroquia, actual Basílica Pontificia de San Miguel, había existido, presidiendo el presbiterio, un gran cuadro alusivo a los titulares del templo obra del pintor José del Castillo, del cual desconocía cual podía haber sido su paradero. Bien, en lo que respecta al cuadro en sí sigo desconociéndolo, pero tiempo después encontré, husmeando por internet, un dato sumamente interesante: un boceto del mismo se conservaba en el madrileño museo Lázaro Galdiano. Así pues, no todo estaba perdido.

Antes de seguir adelante, conviene recordar la figura de este pintor. José del Castillo nació en Madrid el 14 de octubre de 1737 y murió, también en Madrid, el 5 de octubre de 1793. Seguidor de José Romeo, en 1751 logró ser becado en Roma, donde fue discípulo de Corrado Giaquinto, con quien regresó a España dos años más tarde al ser nombrado éste pintor de cámara del rey Fernando VI. De nuevo volvería a Roma en 1758, esta vez bajo la tutela de Mengs, para retornar definitivamente a nuestro país en 1764. Pese a sus grandes aptitudes, su adscripción estilística al moribundo barroco le impidió prosperar en unos ambientes artísticos en los que triunfaba el neoclasicismo, lo que le condenó a ser un segundón obligado a sobrevivir con encargos de segunda categoría, viendo frustrados sus intentos de ser nombrado en 1786 director artístico de la Real Fábrica de Tapices, y pintor de cámara del rey en 1793, poco antes de su muerte. Cabe reseñar que sus rivales artísticos, y quizá también políticos (el valedor de Castillo era el conde de Floridablanca, enfrentado al conde de Aranda) eran nada menos que el clan aragonés formado por los hermanos Bayeu y su cuñado Goya, apoyados por este último.

Pese a ello, Castillo nos legó un centenar de cartones para la fábrica de tapices de Madrid, varios cuadros religiosos para las Salesas, dos retratos de Carlos III y otros del padre Mariana y de Ambrosio Morales para la colección de varones ilustres, siendo autor asimismo de varios grabados para la edición del Quijote patrocinada por la Academia de la Lengua.

Pasemos ahora al cuadro que nos interesa que, como ya he dicho, se conserva en el museo Lázaro Galdiano, a cuya ficha en internet debo tanto los datos alusivos al mismo como su propia fotografía. Su título es Los Santos niños Justo y Pastor conducidos al martirio y está fechado en 1790, lo que lo convierte en una obra de madurez de su autor. Recordemos que la construcción del nuevo templo de la añeja parroquia madrileña había concluido hacia 1758, por lo que el cuadro debió de ser uno de los últimos objetos que se incorporaron a su patrimonio. Se trata de un óleo pintado sobre lienzo de unos 64 por 36 centímetros, y en él se refleja, tal como expresa el título, el momento en el que los hermanos complutenses son condenados al martirio por el pretor Daciano, sentado en un alto podio. En un primer plano se aprecia un ara con el fuego encendido, mientras en la parte superior el Espíritu y dos ángeles con los atributos del martirio, corona y palmas, se aprestan a recibir a las almas de los dos mártires. Al reverso del cuadro, según la ficha, se lee la siguiente frase:

Borroncillo del cuadro del Altar Mayor de la Yglesia Parroquial de San Justo y Pastor de Madrid, pintado por D. Jph. Del Castillo año de 1790, quien lo dedica al Emº y Exº Señor d. Francisco de Lorenzana, Arzobº de Toledo. &.&.&...

El cardenal Lorenzana, recordémoslo, era entonces el arzobispo de Toledo y, por lo tanto, el señor de Alcalá, siendo el promotor de la construcción de la puerta de Madrid.

Y poco más es lo que puedo añadir, salvo que el cuadro forma parte de la colección del museo (originalmente la colección privada de Lázaro Galdiano) al menos desde 1913. En cuanto al cuadro definitivo, es decir, el del presbiterio de la iglesia, resulta llamativo que una obra de tales dimensiones esté en paradero desconocido; quizá se perdiera durante el marasmo que siguió a la invasión napoleónica de 1808, aunque esta hipótesis es tan sólo una mera especulación.




Ver también:
Los Santos Niños en España. Su culto en Madrid
Los bustos ¿desaparecidos? de los Santos Niños del convento de las Trinitarias Descalzas de Madrid
Los Santos Niños en la orfebrería. La placa de bronce de la Fundación Lázaro Galdiano


Publicado el 21-5-2007