Dos postales publicitarias de los años setenta



Aunque, tal como ya he comentado en otros artículos, fueron varias las postales editadas en Alcalá con fines publicitarios, las dos que reproduzco en este artículo presentan unas características peculiares, dentro de su diversidad mutua, que merecen ser recordadas.

Porque, mientras la mayoría de las postales de este tipo solían corresponder a iniciativas de establecimientos concretos -un restaurante, un hotel, una tienda-, y su distribución estaba limitada por lo general a los propios establecimientos, estas dos fueron bastante más allá alcanzando una distribución generalizada, pese a lo cual hoy son extremadamente raras y difíciles de encontrar.

Tal como reza el título las dos postales son de mediados de los años setenta, una época en la que la publicidad todavía no había recurrido a los soportes actuales y era, por decirlo de alguna manera, bastante artesanal. Y, aunque ni siquiera entonces este soporte era demasiado habitual, lo cierto es que responde bastante bien a los habítos de la época.




I. La postal de Avón



La primera postal por fecha de antigüedad es la de la conocida marca de cosméticos Avón, asentada desde hace varias décadas en Alcalá con una fábrica, cerrada hace años, y un centro de distribución todavía en activo. Como es sabido esta compañía multinacional siempre ha desarrollado una peculiar política de ventas, ya que sus productos no se distribuyen por los canales habituales de comercialización, perfumerías o cualquier otro tipo de tiendas, sino por venta directa, muy a la americana, a través de una red de distribuidoras encargadas de organizar reuniones privadas con sus clientes potenciales, método ahora ampliado también a la venta por internet.

Y ahí es donde entra en escena la postal, a la que podríamos considerar de circulación interna dentro de la red de distribución de sus productos, lo que no impedía que al mismo tiempo se pudiera hacer una eficaz -y barata- publicidad de la marca, al ser distribuida por correo.




Reverso de la postal de Avón


Tal como se puede apreciar, el anverso de la misma reproduce cuatro fotografías con diferentes vistas de sus instalaciones alcalaínas, mientras la mitad izquierda del reverso cuenta con un texto impreso mediante el cual se convocaba a las distribuidoras a las reuniones pertinentes relacionadas con su trabajo. Conozco dos ejemplares distintos de esta postal, pudiéndose apreciar diferencias en la redacción del citado texto sin que varíe su sentido. Bajo éste aparece un espacio reservado para la fecha, hora y lugar de la cita, y en la parte inferior del mismo se lee la leyenda:


ALCALÁ DE HENARES (MADRID)
Vistas parciales de las instalaciones de Avón.


La otra mitad del reverso derecha estaba reservada al sello y a la dirección de la destinataria, impresa esta última en una etiqueta autoadhesiva que se pegaba en el recuadro reservado para ello, y que por respeto a la intimidad he borrado en el ejemplar que reproduzco.

La postal no cuenta con ningún tipo de pie de imprenta ni de depósito legal, y aunque evidentemente no estaba a la venta al ser de uso interno de la empresa, sí circuló postalmente tal como atestigua el sello matasellado, que nos permite conocer asimismo la fecha en la que fue franqueada: el 3 de julio de 1975. El segundo ejemplar es algo posterior, del 7 de enero de 1976.




Variante en blanco y negro de la postal de Avón


Existe también una segunda versión con el mismo anverso, pero en blanco y negro. La desaparición del color es la única modificación con respecto a la anterior, ya que el reverso es idéntico incluso en el texto impreso de la postal de 1976. Sin embargo la fecha del matasellos es de casi tres años más tarde, el 30 de diciembre de 1978. Esto parece indicar que la versión en blanco y negro sería más tardía que la versión en color, quizá -aunque aquí sólo es posible especular- fruto de un intento de ahorrar gastos en unos años en los que la fuerte inflación disparó los costes de papel e imprenta, provocando fuertes incrementos de precios en los libros y en todo el material anejo. De hecho, la cartulina de esta segunda postal es bastante más endeble que la de sus predecesoras, lo que confirmaría esta hipótesis.




Reverso de la variante en blanco y negro


Lamentablemente desconozco el período de tiempo durante el cual Avon utilizó este sistema para mantenerse en contacto con sus distribuidoras, aunque supongo que ahora recurrirá a medios más modernos y más cómodos -pero mucho menos agradecidos para los coleccionistas- como el correo electrónico... aunque nada puedo afirmar con certeza, ya que ni en mi familia ni en mi entorno hubo nunca una distribuidora de Avón.




II. La postal del Parque Residencial Canarias


Pasemos ahora a la segunda postal, de características muy diferentes a las de la anterior al pertenecer a la campaña publicitaria de una promoción urbanística de la época, concretamente el pomposamente denominado Parque Residencial Canarias -es la actual calle de Juan Guerra-, situado entre la avenida de Pastrana y la calle Luis Vives, junto a la Puerta del Vado. La postal, según todos los indicios, ni se vendió ni se ideó para ser enviada por correo, siendo un simple soporte publicitario.




Anverso de la postal del Parque Residencial Canarias


El anverso reproduce un dibujo con una vista idealizada e idílica de la urbanización, es de suponer que entonces todavía en construcción, en la cual llama sobre todo la atención la amplitud de la perspectiva, que se corresponde con la prosaica realidad -ahí están los edificios para comprobarlo- de una manera tan sólo aproximada.




Reverso de la postal del Parque Residencial Canarias


En cuanto al reverso, podría definirse como una falsa postal, ya que finge imitar una postal verdadera remitida por unos entusiastas e imaginarios compradores a unos familiares, o amigos, invitándoles a comprar un piso en la urbanización, razón para lo cual les enumeran los atractivos de la misma, todo ello en letra manuscrita y lenguaje coloquial. En la parte derecha, la de la dirección, aparece una imaginaria “calle de la Buena Suerte” número 7 -también el número de la buena suerte- que, evidentemente, jamás ha existido en Alcalá. Los nombres de los destinatarios son también simbólicos -Mª Teresa y José Español-, y hasta el sello y el matasellos son de imitación. La fecha de impresión de la falsa postal, abril de 1977, aparece dos veces, en el encabezado del texto y en el matasellos.

Aunque no aparece ningún depósito legal -desconozco si al ser un simple objeto publicitario existía o no la obligación de registrarla-, en la parte “impresa” de la postal sí nos encontramos con el consabido texto descriptivo:


ALCALÁ DE HENARES
PARQUE RESIDENCIAL CANARIAS
Vista de la piscina y área recreativa


Por último, en la franja vertical que separa las dos partes del reverso, zona en la que suele aparecer el nombre de la editorial responsable de las postales “de verdad”, figura CONFITAL, S.A. - Madrid, junto con unos números de teléfono. Aunque lo más probable es que se tratara de la empresa constructora, o la promotora, huelga decir que a estas alturas resulta imposible seguirle el rastro. En cualquier caso, tampoco tiene demasiada importancia.


Publicado el 26-6-2012
Actualizado el 5-9-2012