Tunguska



Remota región de la Siberia central sobre la que el 30 de junio de 1908 tuvo lugar una misteriosa explosión cuyas causas todavía están sin explicar por completo, aunque la hipótesis manejada por los astrónomos es que pudiera haberse tratado de la caída de un pequeño cometa, o fragmento del mismo, volatilizado en la atmósfera a una altura de entre cinco y diez kilómetros, dado que la inexistencia de un cráter induce a descartar que hubiera podido tratarse de un meteorito pétreo de gran tamaño.

La magnitud de los daños, no obstante, fue considerable, arrasando todo lo que se encontraba debajo del lugar de la explosión en un radio de varias decenas de kilómetros y haciendo notar sus efectos hasta varios cientos de kilómetros de distancia. De hecho, se calcula que la explosión fue equivalente a la de una bomba atómica de entre 10 y 15 megatones de potencia.

Pese a que en los círculos científicos existe unanimidad a la hora de considerar las causas de la explosión, se han postulado varias teorías alternativas a cada cual mas esotérica, siendo la más popular de todas ellas la que la atribuye al accidente de un platillo volante averiado.


Publicado el 22-11-2012