Planeta no apto



INFORME DE LA MISIÓN EXPLORADORA AL SISTEMA PLANETARIO XA/4237/6311J *

Por AALT 5742XPPPP, comandante científico de la nave UUURR



1. ANTECEDENTES


En la fecha estelar 95/42/P, y siguiendo las instrucciones recibidas del Comando Central de Exploraciones Espaciales, arribamos al sistema planetario XA/4237/6311J con objeto de realizar una investigación sobre su nivel tecnológico y social. Este sistema planetario se encuentra situado en el interior de la reserva natural R-53, ubicada a su vez en una región periférica y poco explorada de la galaxia. En ella existen varios planetas habitados, pero en todos ellos las razas dominantes se encuentran reducidas a un estado pretecnológico que cae dentro del ámbito de la ley 87/1A de fecha estelar 47/18/Z de protección del medio natural junto con la vida animal prehumana. Por esta razón el acceso a la reserva está prohibido en todos los casos, excepto con fines científicos y previa autorización de las autoridades pertinentes.

Gracias a una visita previa realizada por el comandante JRRR27HKZL al mando del carguero AAAAUU hace tres pñytrz (intraducible, debe de tratarse de una unidad de tiempo desconocida por nosotros), se sabía de la existencia de una civilización pretecnológica en el tercer planeta del sistema XA/4237/6311J, aunque dado lo somero de su informe (se vio obligado a detenerse allí con objeto de realizar unas reparaciones en los impulsores de su nave, sin entrar en contacto en ningún momento con los aborígenes) los datos aportados en el mismo son sumamente escuetos a pesar de que, siguiendo las ordenanzas, procedió a instalar varios sensores automáticos en lugares estratégicos, tras lo cual abandonó el sistema para no incurrir en un incumplimiento de las leyes vigentes.

Aunque durante todo este tiempo el sistema ha estado precintado, los sensores automáticos enviaron cierta cantidad de información. Varios de ellos se encontraban instalados en el cuarto planeta del sistema, un astro moribundo y deshabitado, y por ellos supimos, tres ergs (presumiblemente otra unidad de medida de tiempo, asimismo imposible de evaluar) atrás, de la llegada al mismo de varios aparatos no tripulados procedentes del planeta vecino. Los sensores capturaron algunos de ellos, que analizaron minuciosamente enviando los resultados obtenidos al centro de investigación de RAAKJFHJGS, el más cercano al sistema, razón por la que eran controlados desde ese lugar.

Los artefactos resultaron ser sumamente toscos, no alcanzando ni siquiera el nivel 2 de la Escala Tecnológica de UD8EK2K4P, pero indicaban que los habitantes del tercer planeta habían logrado desarrollar siquiera los rudimentos de la navegación interplanetaria. Por tal motivo, y en aplicación de la normativa 47AK, se me envió al sistema, al mando de la UUURR, con la orden de investigar los avances tecnológicos de esta raza.



2. DESARROLLO DE LA INVESTIGACIÓN


El protocolo aplicado a la investigación fue el habitual en estos casos. No estimé necesario realizar ensayos directos, por lo que procedí a instalar sensores en órbita alrededor del planeta, con objeto de evaluar los medios de comunicación empleados por sus habitantes. Éstos utilizan unos toscos sistemas de modulación de ondas electromagnéticas de baja frecuencia, lo que me obligó a realizar previamente ciertos ajustes técnicos ya que los sensores de los que disponía no estaban diseñados inicialmente para operar con un sistema tan obsoleto.

Una vez resuelto este problema previo, procedimos a interpretar la información recibida. No tuvimos la menor dificultad para decodificar las imágenes -planas y sin relieve, por sorprendente que resulte, ya que estos seres desconocen incluso algo tan simple como la holografía-, pero tropezamos con un inconveniente mayor a la hora de descifrar los mensajes hablados y escritos. Por increíble que pueda parecer, existen centenares de idiomas distintos mutuamente incompatibles entre sí... ¡En un único planeta! Semejante muestra de atraso cultural resulta insólita en todo el universo conocido.

Ante la imposibilidad práctica de trabajar con tan elevado número de idiomas, optamos por seleccionar aquéllos que nos parecieron más importantes por ser los más frecuentes, apenas una décima parte de los registrados pero que, no obstante, abarcaban conjuntamente la mayor parte del volumen de mensajes recogido. Una vez descifradas las claves generales por nuestras máquinas analizadoras resultó fácil descifrarlos, ya que en realidad todos estos idiomas presentaban unas estructuras muy simples y extremadamente similares entre sí.

A pesar de disponer de una gran cantidad de información, el sentido de la misma se nos escapaba por completo. Es sabido que la práctica totalidad de las culturas primitivas acostumbran a desarrollar unas pautas de comportamiento relativamente ilógicas, pero nosotros nos encontrábamos frente al mayor ejemplo jamás conocido de absurdo cultural. Incluso tras programar a nuestros analizadores para clasificar los temas comunes eliminando todos los datos redundantes, nos encontrábamos frente a un rompecabezas de aparentemente imposible resolución.

Nuestra primera impresión fue la de encontrarnos frente a una sociedad esquizofrénica que se comportaba de una forma completamente caótica; pero tal sistema social nunca podría ser estable, y a pesar de la evidente tosquedad de su cultura, estos seres parecían haber logrado un cierto nivel de organización y de equilibrio social. Así pues, sospechamos la existencia de alguna clave que nos hubiera podido pasar desapercibida en nuestros primeros análisis.

La solución al problema fue encontrada finalmente por PDKLROE23, uno de los científicos que formaban parte del equipo. Tras un minucioso estudio de varias secuencias diferentes que creyó descubrir, supuso que sólo algunas de ellas pudieran responder a pautas reales de comportamiento de estos extraños seres, siendo las restantes producto de lo que él llamó “fantasía”, tomando este término -no existe traducción, ni siquiera aproximada del mismo, a nuestro idioma- de una de las principales lenguas habladas en el planeta.

Puesto que se trata de un concepto completamente desconocido para nosotros, resulta extremadamente difícil describirlo con palabras. Al parecer, la “fantasía” sería una especie de falsedad, o información no verosímil; y si ya de por sí es insólito que alguien mínimamente civilizado pueda ser capaz de ocultar la verdad, lo que ya rebasa los límites de lo inconcebible es que estas falsedades resulten generalizadas y, aparentemente, sea aceptadas con total normalidad por todos sus congéneres... Podría entenderse que una enfermedad mental incapacitara la mente de un espécimen hasta llegar al punto de obligarle a cometer estas aberraciones, pero es irracional pensar que esta tara pudiera estar extendida por la totalidad de los habitantes del planeta. Simplemente, no podía ser.

La hipótesis de PDKLROE23 resultaba tan absurda, que nuestra reacción inicial fue de escepticismo. Pero ante el callejón sin salida en el que nos encontrábamos, aceptamos finalmente su propuesta, no sin tener que vencer previamente muchas reticencias, de desarrollar unos algoritmos lógicos capaces de discriminar entre lo verdadero y lo falso.

Diseñar los algoritmos resultó fácil, pero la verdadera dificultad estribaba en asignar los parámetros adecuados. No teníamos otra solución que la de recurrir al método del ensayo y error, probando aleatoriamente con las distintas combinaciones hasta encontrar la más apropiada de ellas, aunque por suerte no todas eran igualmente probables.

Así pues, los algoritmos lógicos fueron ajustados de forma que consideraran falsos a todos aquéllos parámetros que se desviaran significativamente de las pautas de comportamiento promedio del conjunto de todas las razas inteligentes del cosmos. Para nuestra sorpresa, descubrimos que la práctica totalidad de la información analizada era rechazada como falsa por los algoritmos, lo cual demostraba hasta qué punto llegaba el desequilibrio del desarrollo social del planeta... Al tiempo que nos quedábamos igual que estábamos al principio.

Unos laboriosos refinados de los algoritmos lógicos (el informe completo con los detalles técnicos se acompaña en un documento adjunto) nos permitieron obtener finalmente la información deseada. Aunque el grado de incertidumbre era relativamente elevado, creemos estar en condiciones de afirmar que hemos logrado interpretar las estructuras sociales del planeta investigado, una vez convenientemente expurgada la ingente cantidad de información superflua, la “fantasía” de los nativos.

Los resultados definitivos muestran claramente, muy por encima del posible margen de error, que la sociedad del planeta no sólo no es estable (de hecho resulta sorprendente que haya llegado siquiera a conseguir ese nivel pretecnológico), sino además que jamás podría alcanzar el nivel mínimo exigido para ser catalogada como especie inteligente. En consecuencia, se recomienda que el sistema planetario XA/4237/6311J se mantenga cerrado de forma indefinida hasta que esa raza se haya extinguido por completo.



ANEXO III

IDIOSINCRASIA DE LOS NATIVOS


Las pautas de comportamiento social de los nativos del tercer planeta del sistema XA/4237/6311J han resultado ser extraordinariamente sorprendentes. Además de la extraña paradoja que supone la existencia, aparentemente conocida y aceptada, de falsedades lógicas, la denominada por ellos “fantasía”, su comportamiento real se desvía por completo de cualquier otro desarrollado por las razas civilizadas conocidas hasta ahora. Al parecer, los aborígenes dan muchísima importancia a la vida privada de sus personajes ilustres, a los que otorgan el título honorífico de “famosos”, lo cual se traduce en un exacerbado culto a la personalidad hacia su casta dominante.

También resulta sumamente frecuente encontrar la narración, realizada con todo detalle, de la vida íntima de familias enteras, suponemos que pertenecientes a la élite de los “famosos”; es muy probable que esta conducta esté vinculada a la anterior, pero nos sorprendió sobremanera que el nombre genérico de estos documentales hagiográficos sea, al menos en una de las principales lenguas del planeta, el de “culebrón”, término cuyo origen etimológico es similar al de un grupo de animales inferiores del planeta algunos de los cuales resultan incluso peligrosos para los nativos a causa de su mordedura venenosa. Estimamos que debe de tratarse de algún tipo de ritual totémico, pero nada hemos podido concretar al respecto.

Otra de las actividades sociales de los nativos parecen ser las competiciones de índole mental, en las cuales varios de ellos intentan demostrar que sus conocimientos sobre la vida de sus próceres son superiores a los de sus rivales. En algunas ocasiones los temas sometidos a competición trataban sobre acontecimientos claramente ficticios, en los que tienen un peso mayoritario las narraciones sobre actos violentos de todo tipo -ellos lo llaman “historia”-, pero por fortuna estas perversiones mentales son francamente minoritarias en comparación con las anteriores.

Asimismo, resulta llamativa la extrema facilidad con la que estos seres, extraordinariamente gregarios, caen en profundas catarsis colectivas. Hemos analizado multitud de escenas en las que decenas, e incluso centenares de miles de aborígenes, se concentran en unos pequeños recintos, a veces cerrados y en ocasiones al aire libre, en los cuales se entregan a un desenfreno iniciático adorando aparentemente -no le encontramos otra posible interpretación que la animista- a varios congéneres suyos que, de forma individual o colectiva, aunque siempre en grupos reducidos, realizan extraños rituales de imposible comprensión. Estos ritos, que suponemos de índole religiosa en la acepción más primitiva de la palabra, puesto que nada tienen aparentemente de teológico, son muy diversos, aunque parecen precisar en muchos casos de prácticas gimnásticas por parte de los oficiantes, a veces con sólo su propio cuerpo, pero en ocasiones auxiliados por diversos instrumentos, tales como esferas de diferentes tamaños las cuales parecen poseer para ellos poderes taumatúrgicos. Aunque nos ha resultado de todo punto imposible interpretar las expresiones empleadas por los nativos para describir estos sorprendentes cultos religiosos, transcribimos aquí varios de los términos más frecuentes en sus mensajes, en la esperanza de que en un futuro pueda ser desentrañado su significado: “fútbol” -con diferencia el más empleado de todos-, “deporte”, “baloncesto”, “atletismo”, “fórmula uno”, “ olimpíadas” y otros muchos.

No faltan tampoco casos en los que estas ceremonias religiosas eran acompañadas por sonidos estridentes y completamente discordantes, lo cual demuestra claramente la esquizofrenia cultural de esta raza. De nuevo transcribimos tal cual varios términos recogidos: “rock”, “heavy”, “discoteca”, “bacalao”...




* Ante la imposibilidad de una trascripción exacta de los nombres propios recogidos en el documento, nos hemos visto obligados a reflejarlos de la manera más aproximada posible, aun cuando ésta se aleje sensiblemente de la fonética real de sus redactores.


Publicado el 25-8-2016