Los Santos Niños en España
Su culto en Sardeda (Asturias)





Vista exterior de la ermita de Sardeda
Fotografía de el llobu tomada de Panoramio



Sardeda -o Sardea, en bable- es uno de tantos minúsculos caseríos que salpican la geografía asturiana. Cuenta con tan sólo con 33 habitantes censados en 2014, y pertenece al municipio de Piloña y, dentro de éste, a la parroquia de San Vicente de Cereceda, por lo que administrativamente es una aldea. Está ubicada en la zona oriental del Principado, a 13 kilómetros de Infiesto (la capital del municipio), 18 de Cangas de Onís y 35 de Villaviciosa.

Puesto que en Asturias, al igual que ocurre en Galicia, las parroquias cumplen la doble función de ser tanto circunscripciones administrativas como religiosas, a causa de lo anteriormente expuesto Sardeda carece de templo parroquial, aunque sí cuenta con una pequeña ermita cuya titularidad corresponde a los santos Justo y Pastor, tal como ya se reseñaba en el Diccionario de Pascual Madoz. Aunque en ninguno de mis viajes a Asturias tuve ocasión de visitarla, gracias a la amabilidad de don José Luis Sánchez, párroco de la cercana localidad de La Riera de Covadonga, me ha sido posible redactar este artículo.




Testero de la ermita con las imágenes de san Isidro (izquierda) y san Justo (derecha)
Entre ambas, relicario y certificados de autenticidad de las reliquias


Poco es lo que puedo decir de la ermita, salvo lo que se aprecia en las fotografías. Situada en un cruce de caminos a las afueras del pueblo, si es que se puede hablar de tales en un urbanismo tan disperso como el de esta zona, es de reducido tamaño y una traza extremadamente sencilla, sin un estilo arquitectónico definido. Al parecer fue edificada en el siglo XVIII, y en ella destaca sobre todo el amplio porche cubierto que ocupa buena parte de su longitud total, el cual está separado del presbiterio por una verja de madera que abarca la totalidad de la divisoria y cuenta con un portón central, también con barrotes de madera, que es abierto durante las ceremonias religiosas. Esto hace que los feligreses se coloquen en el propio porche, tal como se puede apreciar en la fotografía publicada en la página de facebook del obispado de Oviedo, dado que la parte del presbiterio queda ocupada casi en su totalidad por la mesa del altar.

Éste está rematado por un testero plano, carente de retablo y adornado únicamente con dos sencillos altares gemelos, en uno de los cuales se alza la imagen de san Justo y en el otro la de san Isidro. Ambas están acompañadas, tal como comentaré más adelante, por el nuevo relicario de los Santos Niños y por los documentos que acreditan la autenticidad de las reliquias que contiene.




Imagen de san Justo


La primera vez que vi las fotografías me llevé una sorpresa puesto que, aunque el culto al santo madrileño está muy extendido por toda España al ser el patrón de los agricultores, no suele vinculársele con los mártires complutenses, aunque sólo sea por los ocho siglos de distancia que median entre ambos. Claro está que esto no les convierte en incompatibles, y de hecho suele ser normal que en los templos las imágenes de los titulares estén acompañadas por las de otros santos, pero...

Ocurre que, por razones que desconozco, en Sardeda carecen además de la correspondiente imagen de san Pastor, por lo que al llegar el día de su festividad, anunciada como de san Justo, tras la misa se celebra una procesión en la que interviene la imagen del titular acompañada por la de san Isidro. Eso sí, ambos santos son llevados en andas separadas, a diferencia de lo que ocurre con las de los dos hermanos, que suelen ser colocadas juntas. Curiosamente el 15 de mayo se celebra asimismo la fiesta de san Isidro... también con éste acompañado por san Justo. Mayor pragmatismo, imposible.




Procesión con las imágenes de san Justo y san Isidro


Al igual que ocurre en otros lugares de Asturias en la procesión las imágenes van acompañadas por los ramos, una antigua tradición en la que unos armazones de madera de forma piramidal son recubiertos con ramas y flores, sobre las que se cuelgan roscas de pan y dulces, así como otros objetos de adorno. Los ramos se portan también en andas y, una vez terminada la procesión, se subastan entre los asistentes, empleándose el dinero recaudado para costear las fiestas y sufragar los arreglos y las mejoras de la ermita.

En lo que respecta a la imagen de san Justo, es fácil apreciar que se trata de una escultura moderna, presumiblemente posterior a la Guerra Civil. Por analogía con lo ocurrido en otras localidades asturianas cercanas, cabe presumir que las imágenes originales -suponiendo que entonces existiera también la de san Pastor- se perdieran bien durante la Revolución de Asturias de 1934, bien durante la propia Guerra Civil. Sin embargo esta imagen, a diferencia de las producidas en serie por los talleres de Olot de templos como el de La Riera, representa no a un niño de seis años, sino a un muchacho de mayor edad. Ataviado con una túnica larga y sandalias, porta en sus manos una pequeña palma martirial faltando su otro atributo habitual, la tablilla escolar o, en claro pero frecuente anacronismo, un libro.




Misa celebrada por la recepción de las reliquias


Pudiera ser, aunque esto se trata tan sólo una hipótesis, que se aprovechara la imagen de un mártir indeterminado con un aspecto más o menos infantil -he llegado a ver incluso imágenes de san Pancracio sustituyendo a uno de los dos patronos complutenses- y, dada la reducida población de Sardeda, cabe pensar que tan sólo les fuera posible adquirir una imagen para reemplazar a las dos perdidas, la cual fue atribuida, tal como reza en la peana, a san Justo por figurar siempre éste por delante de su hermano mayor. En cualquier caso esto no deja de ser anecdótico frente a lo verdaderamente importante, el tesón de esta pequeña aldea que, pese a todos los inconvenientes, mantiene viva una tradición secular.

Por si fuera poco el 14 de octubre de 2015 fue un día importante para Sardeda, puesto que recibieron unas reliquias de los Santos Niños procedentes de San Pedro el Viejo de Huesca. Esto la convierte en la segunda localidad asturiana en venerarlas tras La Riera... o quizá la tercera, dando que en la Cámara Santa de la catedral de Oviedo se conservaban en la Edad Media unas reliquias de las cuales desconozco su paradero actual. Y sí, en este caso corresponden a los dos hermanos, concretamente unos pequeños fragmentos de las vértebras colocados en un relicario donado por los vecinos.




Otro aspecto de la misa celebrada por la recepción de las reliquias
Fotografía tomada de la página de Facebook del arzobispado de Oviedo


Al igual que sucediera el año anterior en La Riera, la recepción de las reliquias se celebró con una solemne misa concelebrada por monseñor Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo y promotor de su traída, junto con el párroco de Sardeda, Luis Marino Fernández, y el arcipreste de Covandonga, Amaro Balbín, asistiendo también a la ceremonia el párroco de La Riera. Y esto no es todo, ya que a partir de ahora, según informó la prensa asturiana que se hizo eco de la noticia, en Sardeda se celebrará cada 14 de octubre la fiesta de los Santinos -así los denominan en el Principado- junto con las ya existentes de san Isidro el 15 de mayo, y de san Justo el 6 de agosto. Todo un ejemplo de tesón.




NOTA: Todas las fotografías están tomadas de la página de Facebook de Sardeda excepto aquéllas en las que se indique otra procedencia

Ver también: La presencia de los Santos Niños en Asturias (I a IV)


Publicado el 19-11-2015